Te he dicho muchísimas veces que te quiero y sin embargo, no me canso nunca de hacerlo. Aun no puedo creer que haya pasado tanto tiempo desde aquel día, nuestro primer día, el momento en el que entraste en mi vida para no volver a salir nunca. Un día que recordaré siempre y que no puedo evitar sonreír al imaginarlo de nuevo. Un día en el que te convertiste en el todo en mi vida, en mi guía, en mi luz, en mi amigo, en mi apoyo.. Desde entonces, muchísimos momentos juntos. Momentos que por nada del mundo podré olvidar, porque han sido los más felices de mi vida. Momentos llenos de ilusión, de sueños, de amor... Porque durante todo este tiempo, has llenado cada día de un amor que no se puede explicar, que nadie podría entender porque solamente es tuyo y mío. Gracias por todo lo que me has hecho sentir, por todo lo que me has dado, por todos los sueños que hemos construido juntos, por los que hemos cumplido y por los que quedan por cumplir... Pero sobre todo, gracias por haberme hecho la persona más feliz desde el día que entraste en mi vida.. Sabes que a tu lado, al fin del mundo, porque me das todo lo que necesito, no me falta nada si tú estás a mi lado. No te vayas nunca porque no puedo estar sin ti...
No hay comentarios:
Publicar un comentario