viernes, 3 de julio de 2009


Habrás de ignorar tú sensibilidad y usarás toda tú acidez latente,
sobre la cresta empalagosa de quién te propúso un rescate...
Y no obstante ello, no podrás olvidar en cualquiér tarde lluviosa,
que una vez, una mariposa insistente, se poso en tu mano y acarició tú piel cansada.
La visita preanunciada.

Habrás de compartír nuevas risas y encantos desbordantes
,
que todo infierno secreto recreará cómo un magico cine, sobre tú cabeza...
Habrás de olvidarme en los pocos papeles que te he dejádo y en las cuantiosas horas, en que te obsequie mi hombro para tú llanto..

Y sin embargo, no atinarás a buscár mi corazón, cómo tú tesoro aunque una vida te lleve; ni vendrás a rescatarme de una guerra,
un equivoco o mi vida errante.

Y con los años, sin embargo, te sentarás en una ventana de vista plomiza, a buscár la canción que olvidaste y el abrazo calido de quién espantaste.
Hicíste una sombra de la luz que tenías...

No hay comentarios: